El deshielo ha llegado a Chicago. Por primera vez desde que he pisado esta ciudad, he podido salir a la calle sin 20 prendas de ropa encima. No nos emocionemos, digamos que en el momento más caliente del día, la temperatura ha rozado los 11 grados, pero yo los he sentido como 25.
Ha sido un día de lo más peculiar. Pasando por alto el hecho de que en Madrid (ya no digamos en Las Palmas) estaría con el abrigo puesto a esta temperatura y hoy me he ido al gimnasio en camiseta, la gente por la calle parecía feliz. Sólo faltaba Pharrel Williams cantando Happy para tener la banda sonora perfecta.
Hoy he visto gente corriendo, en bicicleta, en manga corta y hasta en sandalias. Hoy por primera vez he visto la arena de la playa bajo la nieve, que parecía llevarse el invierno por las alcantarillas mientras se derretía... Hasta los perros parecían sonreír. Y es que cuando has pasado el invierno más frío de tu vida... 11 grados emocionan, 11 grados se disfrutan, 11 grados te alegran la vida!!
Por ese motivo, me he ido con mi amigo Miquel, me he comprado un helado y me he sentado en un parque a disfrutar del solecito. Porque aquí la primavera llega cuando nosotros lo decimos!
Mañana esta alegría habrá acabado. Aunque seguiremos sobre cero, tendremos un día más frío, y para pasado mañana nos espera una nueva nevada. Pero no importa. La promesa de un verano incipiente queda en el aire. La luz al final del túnel comienza a verse, y por lo que parece, fuera hace sol. We'll see...
Pensaréis que qué hago aquí escribiendo con el día que hace fuera... Pues eso mismo digo yo!! A la calle que me voy!!
Un abrazo!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario